viernes, 31 de diciembre de 2010

Se acaba el año

Se acaba un año difícil. Ya sabéis porqué, así que prefiero no volver sobre el asunto, que repite más que un helado de chorizo.

No sé que ocurrirá en 2011. De hecho, supongo que nadie lo sabe. Ojalá pudiese ver el futuro. Pero eso no es posible. Lo único que se puede es mirar al pasado y ¿de verdad el pasado interesa a alguien?

Yo estoy harta de pensar en el pasado, y por eso, cuando tome la última uva, pediré un deseo: borrar para siempre estos meses que han quedado atrás.

La única cosa buena que me han traído estos tiempos es, precisamente, este blog y todas las personas que los siguen: más de dieciséis mil, según el contador. Me parece una pasada.

Gracias, gracias, gracias por haber estado ahí durante estas semanas tan duras. Hablar de lo que me pasaba, de lo que sentía, lo ha hecho todo un poco más llevadero.

Y ahora... pues ya veremos. Sé que mi madre prepara algo - se ha pasado la tarde colgada del teléfono - pero no quiere decirme qué. Y yo... no sé. Prefiero dejar que sea ella quien hable.

En cuanto a mí, solo quiero escribir el último post del año para desearos lo mejor en todos los sentidos. Espero que 2011 sea el año en el que se cumplan TODOS vuestros sueños.

Un abrazo para mis amigos virtuales

Valeria

No hay comentarios:

Publicar un comentario