viernes, 14 de enero de 2011

Victor

Ayer pasé la tarde en casa de Tara. Fue muy divertido, sobre todo porque hacía semanas que no pasaba un rato largo con alguien de mi edad.

Tomamos sandwiches y chocolate caliente. Nunca me ha gustado mucho el chocolate, pero sucede que, con el frío y la nieve, apetece mucho más. Tara dice que su madre siempre tiene preparada una jarra de chocolate para cuando ella llega. La madre de Tara la cuida mucho. Creo que a veces demasiado.

Tara y sus padres se separaron hace siglos. Eso, supongo, la acerca un poco más a mí. Dice que lo ha superado. Que era muy pequeña cuando ocurrió, y que lo lleva bien. Me parece que no ve mucho a su padre, que también vive en Bline y tiene una tienda de ropa de montaña.

Tara me hablódel chico que le gusta. Se llama Víctor. Víctor Bicand. Según ella, es el chico más guapo de todo el Instituto. De todo el pueblo. De todo el mundo. Víctor. Salta a la vista que está colada por él. Según Tara, no solo está buenísimo, sinoque encima es listísimo, simpatiquísimo y no sé cuantas cosas más.

Supongo que exagera. Pero yo también exageraba al hablar de J. Eso es lo que pasa cuando estás enamorada, o cuando crees estarlo.

Una tarde de cotilleos, sandwiches y chocolate caliente.

Puede pareceros una tontería, pero lo he disfrutado mucho después de estos meses. Tengo la sensación de que soy de nuevo una persona normal.

1 comentario:

  1. ¡Hola! Ya te seguía desde antes. Gracias por pasarte por mi blog y leer la reseña del libro. Me ha gustado mucho. Y sobre todo de quien hablas aquí, Víctor :)

    Un abrazo.

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